jueves, 31 de octubre de 2013

Las tortugas y el calentador





Me regalaron una tortuga hace más de un año. Pasadas unas semanas me regalaron tres más para que la primera no estuviera sola. Todas estas vivían en una pequeña pecera. El tiempo pasaba y yo les daba de comer y les cambiaba el agua, aunque no muy seguido.  Pero un día una de las tortugas comenzó a tener su caparazón muy blando.